Poseer una personalidad
sociable y optimista, acompañada de unos buenos genes podrían ser la clave para
la longevidad, según informó un estudio desarrollado por el Proyecto Genes
Longevos del Colegio Albert Einstein de Medicina.
La investigación, que se
realizó a 500 personas y sus 700 hijos, sugiere que tener una actitud positiva
frente a la vida es tan importante como tener los genes adecuados que nos
predisponen a vivir por más tiempo.
Pero indagaciones como
éstas no son pioneras, en los años 80 ya se había demostrado que quienes vivían
muchos años eran personas trabajadoras, activas, autónomas y con sentido del
humor. Mientras que otros trabajos develaron que las personas con mayor
capacidad de tomar decisiones respecto a su vida, vivían por más tiempo.
Entonces, ¿cómo influye la
personalidad en nuestra esperanza de vida? Para el geriatra del Hospital
Clínico de la Universidad de Chile, Rafael Jara “no se trata de risas y
jovialidad muy evidentes, se trata de sustraerse de los problemas y tomar
distancia de las cosas que nos rodean, lo que permite mirar mejor una
situación.”
Para el doctor Jara más
que los años que sumemos a nuestra vida, es importante alcanzar lo que se
denomina “envejecimiento exitoso”, es decir, la condición de plena salud en
edad avanzada.
“Es necesario que la gente
fije el horizonte en envejecer mejor, porque se puede superar las expectativas
de vida, pero lo ideal es hacerlo en buenas condiciones”, agregó.
En este sentido, el
geriatra Rafael Jara otorgó una serie de consejos para prolongar la buena salud
hasta la vejez.
1. Alimentarse
adecuadamente: Tener una dieta libre de grasa, sal y azúcar elevadas, pues
evita el desarrollo de enfermedades relacionadas con la nutrición.
2. Evitar el consumo
excesivo de alcohol: Éste ayuda al deterioro cognitivo y aumenta las
situaciones de riesgo, como accidentes producto de su ingesta.
3. No fumar: Este hábito
aumenta el riesgo de diversas enfermedades, como accidentes vasculares, cáncer,
entre otras.
4. Realizar ejercicio: La
actividad física disminuye el riesgo de sufrir enfermedades físicas y
cognitivas, como cardiopatías y problemas del lenguaje.
5. Prevenir enfermedades y
deterioro cognitivo: Acudir al médico para evitar enfermedades propias del
envejecimiento, asi como también detectar el estrés y la depresión, que afectan
la memoria.
6. Mantenerse activo
mental y socialmente: Las personas dotadas de mayor educación enfrentan mejor
el estrés y tienen mejores herramientas para enfrentar la vida. También es
recomendable continuar teniendo contacto con amigos y familiares.
7. Usar adecuadamente los
fármacos: No automedicarse o tomar un sinnúmero de medicamentos, ya que aumenta
las situaciones de riesgo en la tercera edad.
En resumen, “tratar de
evitar todos los factores de riesgo posibles, para que las enfermedades que
provocan discapacidad y mortalidad se presenten con retraso”, finalizó el
profesional.
Fuentes: http://www.lapatilla.com
Leorlenis Guaicara
No hay comentarios:
Publicar un comentario