“La
danza para mi, ha sido toda mi vida, mi amor y mi pasión. Es lo que me ha
ayudado a crecer como ser humano. Es una enseñanza de vida, no sólo bailar y
subir a un escenario” manifiesta Verónica Ferrara, bailarina profesional,
nacida en Lechería, quien desde el año 2007 dirige el Centro
de formación académica para la danza.
Comenzó
sus estudios de baile a los 6 años, pero es durante su adolescencia qué comienza
a mostrar interés por el ballet. “Siempre luchando y estudiando” comenta la
artista quién también es Técnico Superior en Informática.
Adentrada
en sus estudios de danza clásica obtiene una beca para estudiar en Caracas con
la maestra Nina Novak. Allí trabajo 6 meses con su compañía de baile. Aunque su
desempeño en esta academia significó una interrupción en sus estudios,
terminado ese periodo, regresó a tierras
orientales para terminar su carrera universitaria.
En
el año 2000 viajó a Italia y durante 6 años se dedicó de lleno al ballet, viajando
por Europa, bailando y preparándose para formarse como maestra de danza e inclusive obtener un título, para de esta
forma transmitir sus conocimientos de manera correcta.
Este
logro fue alcanzado a través de La Royal Academy de Londres, institución
artística de más de dos siglos de antigüedad. Esta organización le otorga, a
quienes obtienen un diploma, el
reconocimiento internacional. Esto permite que existan maestros registrados
alrededor del mundo y Verónica es la primera instructora de ballet venezolana
avalada por esta escuela.
Enseñar
danza clásica puede volverse muy exigente, pues hay ejercicios que se deben
cuidar mucho al momento de ejecutarse. Un mal procedimiento puede acarrear
lesiones y hasta puede llegar a lastimar un cuerpo que tenga todas las
posibilidades para practicar danza clásica de manera profesional.
“El ballet es antinatural, porque tiene
posiciones que no son comunes. Además es
muy delicado y hay que saber enseñar. No es lo mismo una ex-bailarina que da
clases a alguien que estudió para a dar clases y tiene un título de maestra”
afirma Ferrara.
El
año pasado se realizó en el CFAD la primera sesión de exámenes de la RAD y la
encargada manifestó su satisfacción con los resultados.
Con
esto la calidad de enseñanza es cada vez mayor. Para Verónica Ferrara, mucha gente enseña, lo que los
diferencia es la calidad y si están preparados para un compromiso de esta
naturaleza.
Nairim Amaya
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